Los organizadores del Foro Juntos contra la Corrupción estaban preocupados. Dolores Padilla decía: "primera vez que convoco a las cinco de la tarde y me llegan a las cuatro". Efectivamente, a esa hora ya decenas de personas pugnaban por entrar a las instalaciones del salón de actos de la Plaza Rodolfo Baquerizo, en pleno Malecón del Salado, colindando con la 9 de Octubre, centro de Guayaquil. Para las cinco de la tarde, de ese martes 8 de agosto,  se había convocado a ese foro público, donde se escucharían tres experiencias de lucha contra la corrupción y se leería la Carta de Guayaquil, un llamado de la sociedad civil del Ecuador a las instituciones y a la sociedad en su conjunto para que impulsen verdaderamente la lucha contra la corrupción.